miércoles, octubre 24, 2012

El asunto catalán

En primer lugar, que quede claro que yo estoy a favor de la independencia de Cataluña. En plan de que si me dejaran votar en referéndum, yo votaría que sí, que se independizaran y nos dejaran en paz.
Mis motivos no son que si la libertad, que si los derechos históricos, que si no sé que no sé cuanto. Mis motivos son que estoy harto de tanta gilipollez y tanta amenza de que si separan o si no. ¿Y qué si se separan? ¿Perjudicaría al resto de España? Yo creo que no... Como mucho perjudicará a algún politico... Pues que se jodan los políticos.

Bueno, después de la pataleta, quería plantear algo en torno a este asunto. Algo que me parece obvio pero no he visto comentar a nadie. Vamos a partir de la idea de, según los catalanes, que Cataluña es el motor económico de España. Vale, vamos a creernos que eso es verdad. En Cataluña hay mucha industria y muchas empresas.
Incluso la mayoría de la morralla china que se pueda comprar en Madrid, si nos fijamos ha sido importada por empresas con sede en Barcelona.

Ahora un detalle. Para que las empresas catalanas muevan tanto dinero, es que venden y revenden a alguien, ¿no? Vamos, que tienen un mercado. Seguramente vendan productos en todo el mundo, principalmente en Europa, y principalmente en... sí, en el resto de España. El principal mercado de Cataluña es España.

¿Que pasaría si Cataluña dejara de ser parte de España? ¿Que pasaría si fuera un país distinto? En primer lugar, lo lógico sería que tras la secesión, lo que quedara de España cerrara fronteras con Cataluña, y además prohibir importaciones desde el nuevo país. En resumen, que las empresas catalanas perderían su principal mercado. Lo del boicot al cava catalán iba a parecer una broma en comparación a este cierre de fronteras.

Y entonces... lo normal, lo previsible es que, por ejemplo las empresas importdoras de basura china, se trasladaran a España. Yo que sé, por ejemplo a la Comunidad Valenciana, que también tienen puertos. Porque estarían con el problema de elegir entre dos mercados, Cataluña (con 7 millones de habitantes), o España (40 millones, después de restar los 7 de Cataluña). Vamos, si yo fuera uno de esos empresarios, me trasladaba el mismo día que se celebrase el referendum.
También hay montones de empresas de alimentación con sede en Barcelona, cuyos productos se venden solo en España... Se enfrentarían al problema de cerrar o trasladarse. Habrá quien cierre, habrá quien se traslade... Igualmente si no se trasladan, dejarían un hueco de mercado para otras empresas de fuera de Cataluña.

¿Que pasaría, por ejemplo, con SEAT? Pues no se venderían en España, su (teoricamente) principal mercado. Bueno, se venden en todo el mundo, pero sería una oportunidad para Volkswagen para cerrar la marca. Otras opciones posibles sería trasladar la producción de Martorell a Landaben (Navarra), donde hay una fábrica de Volkswagen, y utilizar Martorell para fabricar coches de marcas que no sean SEAT... En todo caso, esos coches se quedarían fuera de España.

Y ya si hablamos la cuestión del fútbol... Con un Barça jugando una liga pequeña y con equipos pobretones, pocos jugadores internacionales querrían jugar ahí. A la mínima oportunidad, mejores jugadores se irían a otras ligas. En pocas temporadas el Barça se convertiría en un equipo de bajo nivel.

Bueno, en resumen: una independencia de Cataluña significaría pérdida de mercado, pérdida de empresas y pérdida de puestos de trabajo. Parte (que no todo) de esas empresas y esos puestos de trabajo se trasladarían a España. En una frase: la independencia es mala para la economía catalana, y buena para la economía española.

A ver si Rajoy lee esto y le concede un referéndum a Arturito.

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